La Peregrinación Europea de Jóvenes (PEJ) comenzó en la tarde del 3 de agosto en la Plaza del Obradoiro de Santiago de Compostela, con un acto oficial de bienvenida que contó con la presencia de Mons. Julián Barrio, arzobispo de Santiago de Compostela, quien ha acogido a los 12 mil peregrinos llegados de distintas diócesis y congregaciones religiosas de España, Italia y Portugal. En el acto también participó un numeroso grupo de obispos —algunos peregrinaron con los grupos de jóvenes de sus diócesis—, junto a las autoridades civiles de la comunidad autónoma de Galicia y de la ciudad compostelana.

Conciertos y actividades

A partir del jueves, los 55 obispos inscritos en la PEJ impartieron algunas de las catequesis de los próximos días en torno a la exhortación apostólica, Christus Vivit, que el papa Francisco dedicó a los jóvenes de todo el mundo. Paralelamente, se pudo visitar el Pórtico de la Vocación en San Martín Pinario, el Ágora de la PEJ, un espacio sinodal de escucha y diálogo para los jóvenes, y el espacio para la reconciliación, situado junto a la iglesia de S. Fructuoso.

También se impartieron más de 100 talleres diarios repartidos por distintos puntos de la ciudad de Santiago sobre espiritualidad, la ecología, el diálogo fe-cultura o la Doctrina Social de la Iglesia, entre otros temas.

La Cruz de los jóvenes y el Icono de las JMJs

Durante esta Peregrinación Europea de Jóvenes, la Cruz y el Icono de las Jornadas Mundiales de la Juventud, que se encuentra peregrinando por el país luso, que el próximo año acogerá la JMJ de 2023, acompañaron a los jóvenes peregrinos durante los actos centrales del Monte del Gozo.

A lo largo de estos días, tanto la Cruz como el Icono se pudieron visitar en el templo parroquial de San Fructuoso —al lado de El abrazo del amor, espacio creado específicamente para que los jóvenes se acerquen al sacramento de la Reconciliación—, hasta la celebración de la vigilia de oración del sábado y la eucaristía de clausura del domingo.