Un total de 733 millones de personas en el mundo pasaron hambre en 2023, según el último informe SOFI, publicado por cinco agencias especializadas de Naciones Unidas. De mantenerse la tendencia actual, en el año 2030 unos 582 millones de personas sufrirán desnutrición crónica, la mitad de ellas en África.

Ante estas cifras demoledoras, Manos Unidas lamenta que a pesar de las promesas y de los grandes titulares el número de hambrientos sigue creciendo, a la par que aumentan las desigualdades y la brecha que separa a ricos y pobres.

La presidenta de Manos Unidas, Celia Pilar, recuerda que en el mundo se desperdicia un tercio de los alimentos que se producen a nivel global.