“Vayan” y “llamen” son los dos verbos que expresan el núcleo de la misión. Nos ayudan a entender que la misión es un incansable ir hacia toda la humanidad para invitar al encuentro y a la comunión con Dios. La Iglesia seguirá yendo más allá de toda frontera. Seguirá saliendo, una y otra vez, sin cansarse o desanimarse ante las dificultades y los obstáculos, para cumplir fielmente la misión recibida del Señor.

El papa Francisco aprovecha para agradecer a todos los misioneros, que han dejado todo para ir lejos de su patria y llevar la Buena Noticia, allí donde la gente todavía no la ha recibido. Pide no olvidar que todo cristiano está llamado a participar en esta misión universal con su propio testimonio evangélico en todos los ambientes.

Mientras que el mundo propone el banquete del consumismo, del bienestar egoísta, de la acumulación, del individualismo,… el Evangelio llama a todos al banquete divino, donde reinan el gozo, el compartir, la justicia y la fraternidad, en la comunión con Dios y con los demás.

Los destinatarios de la invitación al banquete somos todos, sin excluir a nadie. En un mundo desgarrado por divisiones y conflictos, el Evangelio es la voz dulce y fuerte, que llama a los hombres a encontrarse, a reconocerse hermanos y a gozar de la armonía entre las diferencias.

 

¿Qué es el Domund?

 

El Domund (Domingo Mundial de las Misiones) es el día internacional, en el que toda la Iglesia reza por la causa misionera y organiza una colecta para sostenerla. El Domund recuerda la implicación de todos los cristianos en la misión de la Iglesia. En el año 2024, el lema de esta jornada es “ Id e invitad a todos al  banquete”.

Los territorios de misión son las zonas del mundo donde existen dificultades económicas y falta de medios materiales para la evangelización. Por ello, el Papa cuenta con Obras Misionales Pontificias para sostener la labor de la Iglesia a través de la colecta del Domund.

Todos los cristianos estamos llamados a participar activamente en la misión de la Iglesia. No es cosa de unos pocos (los misioneros), sino que todos los bautizados debemos colaborar con la misión y participar en ella. Hay tres formas de unirse a la misión y de vivirla en primera persona: con el tiempo (voluntarios y misioneros), con la oración y con los donativos (apoyo económico a las misiones).

Algunos cristianos sienten la llamada a entregar su vida fuera de su país de origen y a salir a la misión “ad gentes”. Por su parte, las Obras Misionales Pontificias tienen el deber de ofrecer apoyo material y espiritual a aquellos territorios donde la Iglesia se encuentra en fase de crecimiento.

Hay 10.629 misioneros españoles. De ellos, 7.180 están en activo y 3.449 en España, colaborando con la animación misionera o a la espera de nuevos destinos. Los misioneros españoles están en 135 países. El país con más misioneros españoles es Perú (637). Unas 387 instituciones envían misioneros a la misión, cada una con un carisma diferente pero en comunión con el Evangelio.

Lo recaudado en el Domund sostiene la presencia de la Iglesia en los 1.116 territorios de misión. Es una forma de ayudar a todas las diócesis misioneras.

La ayuda del Domund es el apoyo anual para que la Iglesia pueda anunciar el Evangelio en todo el mundo. La colecta realizada en el Domund es el pilar indispensable en el sostenimiento de los territorios de misión.

Se trata de un esfuerzo conjunto alrededor del mundo, en el que cada continente hace su aportación a un fondo universal de solidaridad.

España contribuyó en el año 2023 con 12.426.045,99 €.

Nuestra diócesis de Santiago de Compostela aportó 317.073,48 €.

Las parroquias y colegios de la ciudad de La Coruña contribuyeron con 62.423,64 €.

La parroquia de San Antonio contribuyó con 2.070€.