La comunidad parroquial de San Antonio desea agradecer de corazón a todos los feligreses que han acompañado con su presencia, su oración y su cariño en estos días marcados por la despedida de nuestro querido don José, párroco emérito.

Gracias por vuestra cercanía en el tanatorio, por el respeto silencioso, por cada gesto de afecto, por la participación en la Eucaristía de funeral y por tantas palabras de gratitud hacia quien dedicó tantos años de su vida a servir a esta parroquia con sencillez, fidelidad y entrega.

El testimonio de unidad y fe que hemos vivido es el mejor homenaje a su memoria. Sigamos encomendando su alma al Señor y vivamos como él nos enseñó: con confianza en Dios y con amor a la Iglesia.

Descansa en paz, don José. Tu comunidad te recuerda con gratitud.